En el Valle de la Visión
El valle es una llanura que se encuentra rodeada de
montañas. En la antigüedad las civilizaciones no fundaban ciudades en los
valles, comúnmente en las tierras de Canaán estos valles eran desiertos y
proporcionaban poca defensa natural en caso de ser atacados por civilizaciones
aledañas.
En Isaías 22:1 (LBLA énfasis añadido) comienza la profecía
de Isaías diciendo:
“Profecía sobre el valle
de la visión. ¿Qué te pasa ahora, que has subido toda tú a los terrados?”
Muchos teólogos en sus comentarios de este texto enseñan que
este vallé refiere a Judea, especialmente a la ciudad de Jerusalén. Es en este
valle donde Dios dio visión a Isaías.
¿Qué es Valle de la
Visión?
En un valle hay desierto y hay debilidad, quien está en el
valle es vulnerable. Ningún cristiano con tiempo de convertido puede negar el
hecho de que es en el valle cuando vemos una visión de Dios diferente, cuando
su palabra brota como agua viva al corazón sediento, cuando la oración es más
fervorosa y cuando más anhelamos a Cristo.
Este valle puede ser tribulación, aflicción, persecución,
pobreza, un tiempo de sequía, de desierto cuando contemplamos una visión de
Dios y vemos nuestra gran necesidad de Él.
Cuando vivimos cómodamente, cuando te va bien en tu trabajo,
cuando te va de maravilla en la escuela, cuando tus padres son amorosos, cuando
no hay necesidades económicas, cuando tu relación con tu esposa e hijos va
correctamente. ¿No sientes que tu deseo de orar mengua? ¿Qué tu necesidad de
Palabras de vida y la comunión con Dios disminuye? Sin duda que sí lo has
notado.
Ejemplos de Valles de
la Visión
En la Biblia encontramos varios ejemplos de hombres y
mujeres que se encontraron en valles en sus vidas, no valles geográficos
literalmente, pero si en alegóricamente hablando.
Fue en Egipto, bajo la opresión y esclavitud de Faraón,
cuando los Israelitas vieron grandes portentos y maravillas de Dios, conocieron
a Dios el libertador de la esclavitud.
Fue cuando el pueblo de Israel llego a orilla del Mar Rojo,
atrapados por el ejército de Faraón, sin aparente escapatoria, cuando Dios
mostró su misericordia y poder al dividir el mar.
Fue en el desierto, en esta llanura seca y sin vida cuando
Dios mostró su bondad y proveyó Maná y agua en la roca.
Fue en la debilidad de Israel, cuando Dios mostró su juicio
y entregó la ciudad de Jericó.
Fue en el tiempo difícil del reino dividido, en esta crisis
política y espiritual, cuando Dios recalcó su fidelidad a la promesa y pacto al
revelarnos la venida del Mesías.
Fue en la visión del valle de los huesos secos cuando
Ezequiel vio al Señor mostrar su misericordia, al resucitar y restaurar los
huesos secos.
Fue bajo la opresión Romana, después de un tiempo de
silencio, cuando nos fue dado al Mesías, cuando nuestros ojos vieron la
salvación.
Fue bajo cárcel en calabozos cuando las más dulces cartas
nos fueron dadas por Dios a través los apóstoles.
Es en el valle de la sombra de muerte, cuando el Señor está
más presente.
Será cuando las tinieblas cubran la Tierra, cuando se
levanten el Anticristo, la Bestia y el Falso Profeta, cuando aparentemente lo
malos prosperan que Cristo en un caballo blanco vendrá y juzgará la Tierra, la
justicia y la paz se besarán ese día.
¿Hay esperanza en el
Valle?
¡Claro que hay esperanza! En el Valle podemos clamar más y
Dios se puede mostrar más, es en el Valle cuando vemos sus promesas, nuestra fe
es fortalecida, cuando sus maravillas son más dulces y cuando tenemos una
visión fresca de Cristo.
Nuestros ancestros puritanos escribieron hermosas oraciones
y devociones a Dios, la más famosa fue el libro "El Valle de la
Visión" recopilado por Arthur Bennett. Aquí un pequeño fragmento:
"Señor, santo y
excelso, manso y humilde!
Tú me trajiste para el
valle de la visión, en cuyas profundidades hábito, más te veo a Ti en las
alturas.
Cercado de montañas de
pecado contemplo Tu gloria. Déjame aprender por la paradoja de que el camino
para abajo es el camino, para lo alto, que ser rebajado es ser exaltado, que el
corazón roto es el corazón sanado, que el espíritu contrito es espíritu alegre,
que el alma arrepentida es el alma victoriosa, que no tener nada es poseer
todo, que cargar la cruz es llevar la corona, que dar es recibir, que el valle
es el lugar de la visión.
Señor, durante el día
las estrellas se pueden ver en los posos más profundos, y cuanto más profundo
los posos, más brillantes Tus estrellas resplandecen; Concédeme encontrar tu
luz en mi oscuridad, Tu vida en mi muerte, Tu alegría en mi tristeza, tu Gracia
en mi pecado, tus riquezas en mi pobreza, tu gloria en mi valle."
Excelente devocional.
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